La historia de nuestro país y la tecnología con que contamos actualmente nos recuerdan que, aunque resulte estresante, es necesario identificar y prepararnos para sismos y otros desastres naturales. Esto se vuelve especialmente importante ante la ausencia, tanto de información sobre los riesgos que pasan inadvertidos, como de medidas preventivas que nos ayuden a aminorar dichos riesgos.

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